En la metafísica, los decretos nos permiten manifestar y materializar aquello que podamos necesitar. Una parte importante de los decretos de metafísica son la rapidéz con que estos pueden hacer efecto, asunto que puede ser la clave del éxito para algunos casos requeridos.
A medida que transitamos por la vida nos damos cuenta que hay varios caminos que pueden resultar un poco más difíciles que otros, y por ello la necesidad de un decreto metafísico para despejar esos caminos.
Siempre debemos avanzar con la cabeza en alto y el corazón lleno de esperanzas, confiando en que desde nuestra presencia yo soy y con la ayuda de los seres de la luz vamos a poder lograr nuestros objetivos. Sin más, este es un decreto metafísico para abrir caminos.
Decreto metafísico para abrir caminos
Yo soy la luz del mundo.
Yo soy la esperanza manifestada.
Yo soy la voluntad de Dios en acción.
Yo soy actuando aquí y ahora.
Yo soy ahora mismo abrazando con gran amor el camino que la voluntad de Dios me tiene preparado.
Yo soy aquí y ahora abriéndome paso en medio de mis más grandes sueños y anhelos, me permito manifestar aquellas metas que hay en mi corazón.
Yo soy dándole vida a todos aquellos proyectos de vida que hay en mi alma, de manera armoniosa con todos los seres del mundo.
Hoy, mis metas adornan el sendero de mi vida.
Hoy vivo de victoria en victoria, cada día de mi vida es una nueva meta cumplida.
Hoy se abren caminos hacia nuevas y maravillosas oportunidades en mi vida. Se abren caminos para que el dinero fluya hacia mí sin ningún problema, se abren caminos para que las bendiciones lleguen sin ningun obstáculo que se los impida, se abren caminos para que sea manifiesto todo aquello que sea bueno y necsario para mi vida. Desde mi presencia yo soy así es.
Hoy mi mente cambia de manera extraordinaria. Empiezo a ver caminos donde antes no los distinguía, y mi mente se abre camino al cielo para tener ideas maravillosas.
Yo soy deshaciendo los obstáculos físicos, emocionales, mentales y espirituales, de modo tal que todo aquello en lo que haya la luz de Dios puede llegar a mí sin ningún problema.
Yo soy abriendo caminos hacia nuevas y mejores oportunidades y formas de vida. Abro mi mente para pensar distinto, y abro mi corazón para recibir un maravilloso destino lleno de amor y felicidad.
Gracias padre, gracias madre, gracias yo soy, porque sé que como he pedido así será hecho. Amén
